El aumento en la conectividad no solo ha incrementado los beneficios que el Internet ofrece, sino que también ha supuesto el crecimiento de los problemas de seguridad digital, especialmente los relacionados con el tratamiento de los datos personales.Sin embargo los servicios que se prestan a través de él se han posicionado como un componente indispensable para la realización de nuestras actividades profesionales o de ocio.

Debido a esto, se ha vuelto cada vez más importante la divulgación e implementación de medidas que permitan garantizar la seguridad de la información de los usuarios que navegan en la web. A continuación se presentan una serie de recomendaciones para proteger los datos personales en Internet:

No brindar datos personales en sitios desconocidos

Gran cantidad de páginas web solicitan datos personales. Existen muchos ciberdelincuentes que crean sitios webs idénticos a los de las compañías para robar información. Por ello, antes de dar cualquier tipo de datos, es importante verificar que no se trate de un sitio web falso y conocer el uso que se le dará a la información que se proporcione. Una forma confiable de realizar lo anterior es revisar que el sitio web cuente con el protocolo SSL (Secure Sockets Layer); es decir, que la dirección que está en el navegador inicie con HTTPS.

Tener cuidado con los suplantadores

Una medida esencial para el cuidado de los datos personales en la web conocer de forma clara quien se le proporciona la información. No deben darse datos privados por correo o por Internet, a menos de que sea el usuario quien haya iniciado el contacto y sepa que está tratando con alguien confiable. Por ejemplo, en caso de recibir un correo electrónico de una compañía en el que pidan información personal, no hay que dar clic sobre ningún mensaje; es preferible contactar al servicio al cliente de la empresa para preguntar si efectivamente mandó el mail solicitando dicha información.

Genere contraseñas seguras y no las comparta con nadie

Las contraseñas complejas —es decir, aquellas que integran caracteres como puntos o símbolos, números o distinguen entre mayúsculas y minúsculas— son más complejas de adivinar y, por tanto, evitan que sea sencillo robar los datos personales. Lo ideal es no utilizar la misma contraseña en todas las cuentas y usar las más seguras para acceder a información crediticia o bancaria. Además, es preferible evitar compartirlas con otras personas y, en caso de ser necesario, debe hacerse con alguien de completa confianza.

No dar demasiada información en redes sociales

Las redes sociales sirven para compartir momentos de la vida diaria; sin embargo, hay que ser cuidadosos en la cantidad y tipo de información que en ellas se coloca. Es importante prestar especial atención a las configuraciones de privacidad en cada una de las cuentas, para que los datos no puedan ser vistos por cualquier persona. Nunca deben publicarse datos como dirección, teléfono o nombre completo. Incluso, hay ocasiones en que los ladrones de identidad utilizan la información de redes sociales para responder las preguntas de verificación y con ello acceder a cuentas personales.

Cerrar siempre las sesiones y eliminar la información de forma segura

Cuando no se esté utilizando un navegador de confianza es necesario cerrar las sesiones en las cuentas de correo o redes sociales. Asimismo, deben eliminarse los archivos descargados o consultados y borrar el historial de navegación. En el caso en que una persona se vaya a deshacer de un computador o dispositivo móvil, tiene que borrar cualquier información almacenada en ellos, como contraseñas, mensajes, contactos y demás.

Aunque estas recomendaciones no son las únicas que pueden implementarse, sin son algunas de las más importantes que permiten proteger la información personal de los usuarios que navegan en Internet. Es indispensable siempre estar atento y mantenerse actualizado, a fin de estar protegido de las formas de operar de los ciberdelincuentes.